Son las personas las que impulsan la entrega del proyecto. Estas personas se organizan en distintos roles o funciones para que el proyecto funcione de manera efectiva y eficiente. Coordinar un esfuerzo de trabajo colectivo es muy importante para lograr el éxito en cualquier proyecto. Existen diferentes formas de coordinar proyectos según el contexto y el enfoque seleccionado. En algunos, lo más adecuado será una coordinación descentralizada, donde existan equipos empoderados, auto organizados y autogestionados. En tanto que, para otros proyectos, el mejor beneficio se obtiene a través de una coordinación centralizada, es decir, existirá un líder y/o un director del proyecto o programa, que será el que coordine y lidere al resto de los miembros del equipo. Algunos otros proyectos pueden utilizar una coordinación centralizada, pero beneficiarse con algunos equipos que estén auto organizados y autogestionados. Esto, para lograr el éxito de los proyectos y otorgar el valor que la organización espera. Es también importante señalar que cada proyecto debe tener bien establecidos los objetivos y el alcance del proyecto y del producto para lograr dar cumplimiento a los beneficios planeados. El alcance del producto lo podemos definir como las características o atributos que deben lograr los servicios resultantes o entregables del proyecto. Ejemplos pueden ser los requerimientos del cliente, el color, el tamaño, entre otros. En tanto que alcance del proyecto se debe interpretar como todo el trabajo que debe ser realizado para lograr cumplir los objetivos establecidos, los cuales, a menudo, se definen con verbos tales como diseñar, construir, elaborar, ajustar, entre otros, sin olvidar que los resultados planeados a lograr por el proyecto o por el programa deben estar alineados a la planeación estratégica de la organización, brindando los beneficios esperados. El líder director del proyecto, en conjunto con los miembros de su equipo, deberá de manera continua y periódica, al lograr un hito o "milestone", si se trata de un proyecto con enfoque tradicional o predictivo, o al terminar un "sprint", si se trata de un proyecto que sigue un enfoque ágil, revisar y contrastar si los resultados parciales obtenidos siguen alineados a los objetivos organizacionales y, por lo tanto, aportando valor. En caso de que los resultados, por la razón que fuese, ya no se alineen a los objetivos de la organización, debe tener la oportunidad de suspender o abortar el proyecto y no seguir disponiendo de los recursos, los cuales, como se ha comentado, son finitos y escasos. De acuerdo a la guía del PMBOK, en la última década, se ha producido una transición paulatina y gradual de los conceptos de dirección de proyectos, donde los criterios, tales como la definición del éxito y el cumplimiento del alcance, cronograma y los objetivos del presupuesto, han pasado a medir el valor y los resultados, ya no las salidas o outputs del proyecto. La gestión del producto está alineada a este concepto de valor. A continuación, se presenta esta imagen tomada de la guía del PMBOK. Esta tabla brinda información sobre el desarrollo del producto, la cual plantea consideraciones sobre adaptación para que los equipos del proyecto las tengan en cuenta. Describe cómo los productos y servicios continúan desarrollándose y evolucionando a través de su uso y durante su vida útil. A lo largo de los temas previos, se ha comentado el hecho de que los proyectos, los cuales pueden tener un solo entregable o entregables múltiples, periódicos y continuos, los programas y los portafolios deben lograr los resultados para los que fueron planeados, es decir, aportando el valor correspondiente. Pero, qué o cómo es lo que se debe entender por valor. La guía del PMBOK, define valor como la importancia o cualidad de algo. Los diferentes interesados perciben el valor de múltiples y de diferentes maneras. La aceptación y satisfacción de las partes interesadas es un factor clave de desempeño para evaluar los entregables. Y mientras los clientes pueden definir el valor como la capacidad de usar características o funciones específicas de un producto, las organizaciones pueden centrarse en el valor de negocio, determinando este de una manera muy simple, mediante una sustracción o resta, donde a los resultados o beneficios obtenidos habrá que restarles el costo económico por haberlo logrado. En el caso de proyectos de impacto social, la situación es otra. En estos casos, habrá que evaluar el impacto social que se tuvo en una comunidad o la contribución que se logró para un grupo de personas en específico, tales como ciertas comunidades o la contribución al medio ambiente. El sistema para la entrega de valor se puede definir como el conjunto de actividades estratégicas del negocio dirigidos a la elaboración, construcción, sostenimiento, y/o progreso de una organización. Los portafolios, programas, proyectos, productos y operaciones pueden formar parte del sistema de entrega y flujo continuo de valor de una organización. En el siguiente gráfico se explica este sistema. Con lo revisado en este video, acerca del alcance del proyecto y del producto y el valor y los beneficios para la organización, identifica los siguientes elementos. ¿Cómo se puede definir el alcance del producto? ¿Cómo se puede definir el alcance del proyecto? ¿Cómo se puede definir el sistema para la entrega de valor?