Uno de los temas muy importantes también en el esquema clásico de análisis de políticas públicas que estamos siguiendo en este curso, ¿no? es lo que se llama la agenda, ¿no? Es decir, la agenda de actuación de los poderes públicos, ¿no? Es decir, aquello que de alguna manera define por qué un ayuntamiento, un gobierno regional, un gobierno del Estado decide abordar, ¿no?, unas actuaciones determinadas y no otras, ¿no? Es decir, cómo se produce, ¿no? ese proceso que genera una selección ante la multitud de problemas que puedan existir en una sociedad determinada qué es lo que provoca que el gobierno escoja unas y las convierta en políticas, ¿no? en programas de actuación. La hipótesis que uno podría imaginar es que esto dependerá de la importancia objetiva, ¿no? que esos problemas puedan tener, ¿no? Es decir, podríamos imaginar que idealmente haríamos un listado, ¿no? de situaciones problemáticas que existen en una sociedad y escogeríamos como prioridad aquella que afecte a más gente, que sea más grave. Esto partía de la hipótesis de que hay una posibilidad objetiva, ¿no? de establecer esa, ese escalado, ¿no? esa ese arranque. ¿Es realmente así? Hagamos un pequeño retroceso. Es decir, desde el punto de vista de percepción social cómo se, cómo se define lo que son problemas de lo que no son problemas. Sabemos que existen para eso por ejemplo encuestas, ¿no? Es decir, podríamos hacer una encuesta entre los alumnos de la Universidad Autónoma de Barcelona y preguntarles cuáles son los problemas más graves que ven en la universidad y nos saldría un listado de problemas, ¿no? Podríamos hacer lo mismo en un barrio de la ciudad de Medellín o en, en digamos, en toda la nación argentina y nos saldría, ¿no? un listado de problemas. Podríamos imaginar por lo tanto que los poderes públicos simplemente lo que tienen que hacer si no quieren abordar el tema complicado de la objetividad es basarse en el, en el ranking que la propia sociedad a la cual quieren, ¿no? El recto de la Autónoma, el alcalde de Medellín o la presidenta de Argentina pues quieren abordar cosas. ¿Es así? Yo creo que estamos ante una, ante un tema clave en la agenda, ¿no? Es decir, qué es lo que hace, ¿no?, que ciertos problemas sean más visibles que otros y qué es lo que hace que algunos de esos temas más visibles acaben ocupando posiciones relevantes en la agenda de los poderes públicos. Es decir tendríamos dos elementos, ¿no? La agenda social, por así decirlo, y la agenda de los poderes públicos. Es decir, tendríamos por un lado aquello que en la percepción social se ve como más problemático, y por otro lado tendríamos aquello a lo que, a lo cual los poderes públicos en el nivel que sea le dan una mayor significación y generan los programas. En general debemos pensar que hemos hablado a lo largo de este curso también de actores, ¿no? Los actores como tienen intereses y actúan en un entorno social determinado pretenden que el problema que les afecta a ellos especialmente como actor sea visto como un problema que no solamente les afecta a ellos sino que es visto de manera más colectiva. ¿Por qué? Porque en cuanto, cuanto más personas compartan ese problema, o esa mirada sobre ese problema, más posibilidades tendrán de que ese problema alcance notoriedad y acabe siendo, digamos, tomado por los poderes públicos como un tema relevante. Por tanto, diríamos que no hay un elemento de objetividad sino que la agenda no es simplemente el resultado mecánico, ¿no? de, del conjunto de percepciones, sino que hay actores que pueden manejar, manipular, condicionar esas percepciones, haciendo que ciertos temas sean más visibles que otros. O al revés, cuidado, haciendo que algunos temas sean menos visibles. Yo puedo tener interés en que algunos temas se conviertan en problema, o puedo tener interés en que ciertos temas no se conviertan en problema. Aquí tenemos toda la gran importancia que se da en políticas públicas a los medios de comunicación. Y más reciente no solo a los medios de comunicación sino a las redes sociales por ejemplo, ¿no? Que Internet digamos ha cambiado ese espacio comunicativo. Por tanto, los actores operan en los medios de comunicación, en las redes sociales para promover ciertos temas o evitar que aparezcan ciertos temas, ¿no? porque saben que los temas pueden adquirir más o menos relevancia y podrán tener más o menos oportunidades de ser, de, de ascender, diríamos, ¿no? a la agenda de actuación de los poderes públicos. En un papel que tenemos toda la actuación de los lobbies, de los grupos de interés, de la capacidad de influencia sobre los medios de comunicación, de que ciertas noticias sean digamos priorizadas o no. Todo lo que en cada país seguro que tenemos multitudes de ejemplos que esto ocurre. Por tanto, hipotéticamente tendríamos una situación problemática, algunos actores que pretenden que eso se convierta o no en un tema de agenda social, y que intentan alcanzar el status de problema al cual le dedicamos una política pública. ¿Puede ocurrir que esto ocurra al revés? Es decir, lo que estamos describiendo es una hipótesis de problema busca solución, ¿no? Es decir, tenemos un problema, buscamos solución. Pero cuidado, también podría pasar, y hay bastantes ejemplos de esto, en que los poderes públicos tengan recursos para ciertos temas y no para otros. Por lo tanto, a la hora de ser más populares y de generar mayor deseo en esas políticas tendrán tendencia a dedicar recursos, a dedicar esfuerzos sobre, a aquello sobre lo cual tienen recursos, tienen posibilidades de actuación y tienen razonablemente idea de que pueden obtener resultados. Por tanto nos podría ocurrir que no siempre estuviéramos en la situación de problema busca solución sino que a lo mejor también nos encontramos con casos en los cuales solución busca problema. Es decir, yo decido desde los poderes públicos cuáles son los temas sobre los cuales quiero actuar, los convierto en temas relevantes, ¿no? A través de una rueda de prensa, manejando los medios, etcétera. Y acabo construyendo, ¿no? eso que, sobre lo cual yo tenía recursos y posibilidades lo acabo construyendo, ¿no? como agenda social y esto me permite avanzar en una política sobre la cual tengo aspiraciones de que tenga resultados y que obtenga más legitimidad. Es decir, en conclusión, el tema de agenda es muy importante porque es lo que hace que los problemas algunos sean vistos como muy relevantes o no, puede operar en un sentido positivo, quiero que esto se convierta en problema, o al revés, quiero que esto no se convierta en problema, no es un elemento objeto, ¿eh? Porque hay elementos de objetividad, evidentemente número de muertos de accidente de tráfico, número de personas de exclusión social, número de personas sin trabajo, esto es objetivo, son evidencias, pero sobre las evidencias construimos argumentos, generamos percepción. Por tanto, hay un elemento objetivo pero hay también fuertes dosis de subjetividad y de manipulabilidad de este tema, ¿no? Finalmente, cuidado con pensar que siempre pasamos del problema a la solución, podemos encontrarnos que a veces tenemos solución que busca problema, ¿no? Acabo con una anécdota, ¿no? Me acuerdo que una vez me encontré a una, a un ex alumno mío de la facultad y dije bueno, ¿dónde estás ahora? Y dice estoy trabajando en la oficina de promoción económica del Ayuntamiento de Barcelona. Y ¿qué haces? Bueno, dice, hemos obtenido recursos de la Unión Europea para digamos, formar a mujeres que quieran ser empresarias. Digo y ¿qué estás haciendo? Dice, estamos buscando un grupo de mujeres para apuntarlas en los cursos de formación. Digo porque no habéis partido de, de esa demanda social. Dice no, no, son recursos que han venido de la Unión Europea y que vienen you formateados, ¡No? O sea, son, son unos fondos terminales, digamos, están pensados digamos, están condicionados. Por tanto ahora estamos buscando mujeres que quieran hacer el curso de empresarias. Digo pero, a ver, a lo mejor sería más importante que hiciéramos escuelas infantiles, ¡No? guarderías, porque así si las mujeres tuvieran donde dejar a los niños, ¿no? o las familias tuvieran donde dejar a los niños esas mujeres podrían pensar que son empresarias. Dice sí, pero para eso no tenemos fondos, solamente tenemos fondos para hacer cursos para mujeres que quieran ser empresarias. Al margen de la anécdota, yo creo que este es un clásico ejemplo, ¿no? de distancia entre el ámbito decisorio, ámbito donde se implementa, allí se decide lo que es un problema, ¿no? Y al final cuando llega a Barcelona es solución busca problema, no problema busca solución.