Bienvenidas y bienvenidos. Vamos a empezar la sesión sobre movimiento No Hate Speech. ¿Alguna vez estás navegando por internet os habíais encontrado con este logo? ¿El movimiento de No Hate Speech? Pues fijaos, es una campaña juvenil que empezó en el año 2013 a través de campañas nacionales en los diferentes países. Pero ¿quién lo promueve? Pues el Consejo de Europa, fundamentalmente aquellos países que entre el año 2013 y 2017 quisieron abordar esta temática. ¿Qué es lo que pretendían trabajar? Pues a partir desde los diferentes estados, pero también con organizaciones, ONGs, instituciones, entidades, pero sobre todo con la juventud, lo que querían era movilizar con éxito la lucha contra el discurso del odio y la promoción de los derechos humanos. Fijaos en este mapa. Tenemos 17 países, estos 17 países se centraron en el trabajo o en el desarrollo de las diferentes campañas. ¿Cuál era la finalidad? Querían abordar la lucha contra el etnocentrismo, la discriminación, la intolerancia, ¿hacia qué colectivos?, pues cualquier minoría o por ejemplo los migrantes. Pero cuidado, no solo eso, sino que también querían abordar la lucha contra la discriminación y los prejuicios contra la gitanofobia, la cristianofobia o la islamofobia, pero también la misoginia, el sexismo, o cualquier discriminación orientada hacia identidad de género. ¿Qué acciones propone? Pues son múltiples y variadas. Los diferentes comités de campaña nacional de los grupos de apoyo del movimiento No Hate Speech que saben cómo se llamaban, tenían que liderar algunas de esas actividades que se iban a hacer a lo largo de todos estos años. Se nombraban unos responsables que nuevamente tenía que ser gente joven, con energía, y que tenían que trabajar políticas de juventud, reflexionar sobre temas de gobernanza, sobre seguridad en internet, y como os he dicho anteriormente, los derechos humanos. La mayoría de estas campañas se centran en generar conciencia, conciencia en la red. De aquí que también sea sobre todo un movimiento vinculado a internet. Algunos ejemplos de las actividades que fueron trabajando. Se diseñó un manual para combatir el discurso del odio en internet a través de la educación de los derechos humanos que es este documento que veis aquí, que son las orientaciones. Aquí podrías encontrar diferentes ejemplos, desde cursos de formación, conferencias, seminarios, lo más interesante los eventos para jóvenes, festivales, flashmobs, y muchísimas actividades educativas alrededor de estos entornos de aprendizaje tanto formal como podría ser informal. ¿Cuáles son los objetivos de la campaña? Son muchísimos, pero yo creo que se podrían resumir, como dicen en su propia página web, en seis. Tenéis el primero. Sensibilizar sobre el discurso del odio dentro y fuera de internet. También apoyar la puesta en marcha de diferentes actividades, no solo aquellas que dirige a las propias campañas, sino a cualquier institución que quisiera hacerlo o cualquier entidad que quisiera desarrollarlo. También difundir herramientas para denunciar el discurso del odio fundamentalmente en internet, como ahora podría ser en Facebook, en Twitter, en Instagram, cuidado que en Tik Tok todavía no existía. También movilizar los socios nacionales y europeos para prevenir y luchar el discurso del odio, y la intolerancia, nuevamente, dentro y fuera de internet. No querría que os quedarais con la imagen que es solo en los discursos que se generan en internet, también en el día a día en nuestro contexto más cercano. Penúltimo objetivo. Promover la alfabetización digital. ¿Qué es lo que se quería? Que la juventud participara en la gobernanza de sus instituciones, de su país, de sus estados, desde una medida muy democrática. Y finalmente, la idea era contribuir a este plan de acción del Consejo de Europa para radicalizar a la juventud en la lucha contra el discurso del odio. Esta radicalización es lo más interesante. Radicalizarse significa democratizarse, es decir, fomentar la participación para luchar contra el odio. Pero ¿a qué se enfrenta? ¿A qué se enfrentaba este movimiento? No sé si os habéis fijado en las redes sociales, muchas veces se genera un mensaje y automáticamente se empieza a discriminar, bien porque eres mujer, bien porque eres gorda, bien porque eres gitana, o bien porque eres islámica. Lo que se quiere expresar, lo que se pretende es que las personas se puedan expresar libremente sin que nadie te censure tu opinión. Pero cuidado, esta libertad de expresión no es gratuita. Tu libertad de expresión acaba donde empiezas a discriminar a otras personas. Por lo tanto, hay que asumir que el límite de nuestra libertad es la libertad del otro. Por lo tanto, hay que intentar proliferar un nuevo lenguaje cargado, o sea, intentar proliferar un nuevo lenguaje que descargue de hostilidad y de negatividad. ¿Cuáles son las herramientas que promueve el movimiento No Hate Speech? Por ejemplo, tenéis los comités nacionales que se fueron creando en cada uno de los países, y que fueron los grandes financiadores y los motores cada uno de ellos. Está evidentemente la página web en la que podéis encontrar múltiples ideas, campañas y material. Se generó también una plataforma de internet para justamente ir uniendo lo que se iba haciendo en los diferentes países, e ir generando sinergias y redes. Lo más importante también, se creó un observatorio del discurso del odio que intentaba ir mirando cuáles eran aquellos puntos, aquellas situaciones y movimientos que se iban generando durante estos cuatro años en los 17 europaíses que formaron parte. Se creó un blog, donde se fueron uniendo los diferentes materiales sobre la campaña de acción desde trípticos, carteles, información sobre los seminarios, sobre las conferencias, sobre los festivales, también se creó un foro de debate online en el que la gente podía compartir todas aquellas inquietudes, experiencias o situaciones que se habían podido crear. También se informaba sobre los diferentes eventos que se iban creando en los diferentes países, y una de las campañas, de las iniciativas que también fue muy interesante fueron los días europeos. Durante estos cuatro años, se determinaron cuáles eran aquellos días que podrían ser hitos para focalizar el movimiento No Hate Speech. Pero, claro, diréis, bueno, ¿y yo qué puedo hacer? Soy joven, ¿podría estar en este movimiento? Pero realmente, ¿yo qué puedo hacer? Bueno, tenemos cuatro grandes líneas de acción. Una primera es informar y sensibilizar tanto en el ámbito formal como no formal, a otros jóvenes, pero no solo jóvenes, sino también personas mayores o niños, es decir, que os podéis, se podrían organizar para hacer este tipo de acciones. Otra acción sería las de alerta. Es decir, denunciar aquellas situaciones en las que vosotros habéis visto que hay contenidos abusivos, o por ejemplo, que hay ciberacoso, que eso también existe y que a veces es visible y que deberíamos de denunciar. Una tercera acción, otro conjunto de acciones, sería las movilizaciones e intervención social, o acciones jurídicas. Es decir, si lo que veis en vuestro entorno más cercano es alguna situación de discriminación, podéis movilizaros, podéis denunciarlo, y a partir de aquí buscar sinergias con otros colectivos para emprender acciones jurídicas. Y finalmente, también se pueden hacer acciones de solidaridad con aquellas víctimas que hayáis detectado del discurso de odio, fundamentalmente en internet. Es decir, podéis intervenir en Facebook, podéis intervenir en Twitter, podéis intervenir en Instagram, cuando alguien ha sido acosado vosotros podéis hacer justamente el contra al discurso del odio. Y finalmente, por ejemplo, a título de síntesis, desde el movimiento No Hate Speech, se hizo un estudio de cuáles serían diez acciones positivas o diez acciones negativas. Por ejemplo, empecemos por lo negativo. Podríamos evitar calificar una sugerencia de inútil, irrelevante o estúpida o una persona, o una idea, o una acción. Es decir, vigilar mucho el lenguaje. Otra de las cosas, podríamos evitar generalizar, el generalizar cualquier situación. Algo que me pasó a mí, parece que pasa a todo el mundo. O por ejemplo, también menospreciar algunas de las ideas que dé otra persona simplemente por el hecho de ser diferente a mí. Tres ideas. Ahora, otras acciones positivas para contrarrestar e ir acabando. Por ejemplo, podemos proponer debates y cuestiones que hagan que el grupo vaya avanzando y vaya profundizando en la reflexión. Otra opción, hacer ejercicios de confianza entre el propio colectivo con otras instituciones para generar redes y que eso genere un espacio de confianza, de sinceridad y de tranquilidad. Y finalmente, por ejemplo, también podríamos hacer, es hacer un llamamiento a la empatía entre los seres humanos preguntándoles cómo se sienten o cómo se sentirían en una situación. Es decir, trabajar temas de empatía para darnos cuenta de lo que pueden sufrir otras personas y cómo lo viviríamos nosotros. Eso es algo muy, muy importante. Por lo tanto, os recomiendo que visitéis esta página web del movimiento No Hate Speech para poder reflexionar sobre cómo combatir y cómo luchar contra los discursos del odio.