[AUDIO_EN_BLANCO] [AUDIO_EN_BLANCO] Bien, los equipos de liderazgo instruccional contribuyen especÃficamente ayudando a que la organización educativa concentre parte de sus esfuerzos en el núcleo central del trabajo de la organización escolar. Esto es los procesos de enseñanza y aprendizaje. Esto no significa que no existan otros desafÃos y tampoco que vamos a dejar de hacer otro esfuerzos relevantes para el desarrollo organizacional e institucional de las escuelas. Esto simplemente significa, que vamos a asegurar nuestra influencia en la enseñanza y el aprendizaje en algunas áreas especÃficas de mejora, dónde nos interesa potenciarlo. La primera conversación que los equipos de liderazgo instruccional promueven y asà desarrollan una instancia de colaboración acotada, tiene que ver con la pregunta fundamental de, ¿qué entendemos por una buena enseñanza? En este caso, ¿qué entendemos por una buena enseñanza en una asignatura especÃfica en un nivel particular de enseñanza? En nuestro proyecto nos concentramos en, ¿qué entendemos por una buena enseñanza en las matemáticas? y ¿qué entendemos por una buena enseñanza en los primeros niveles de la enseñanza secundaria? En matemáticas parece ser importante asegurar prácticas y oportunidades de ejercitación en los estudiantes, lo cual permite amplias oportunidades para integrar la dimensión declarativa del conocimiento con la dimensión procedimental y la dimensión acotada o condicionada. Aprendimos durante este proyecto, que en matemáticas son súper importantes los contenidos especÃficos que aluden a los temas básicos del álgebra, las probabilidades, la geometrÃa, etcétera. Y en matemáticas es muy difÃcil entender estos contenidos, sin tener oportunidades profundas de ensayo y ejercitación. En este, en este nivel el estudiante no solamente aprende qué y cómo resolver, sino cuando y por qué debe utilizar determinadas estrategias. El aprendizaje en las matemáticas es una oportunidad inigualable para aprender a desarrollar el pensamiento estratégico y táctico en la resolución de problemas. En ese sentido, la definición de una buena enseñanza en matemáticas debe recoger este sello común y va a tener consecuencias importantes en términos de el trabajo en la sala de clase. Definir qué se enseñará en matemáticas, parece ser algo muy cercano a definir cómo se enseñará y cuándo se enseñará y aprenderá ¿qué cosa? En ese sentido, las matemáticas nos dieron la oportunidad de profundizar en el concepto de selección de aprendizajes clave. Esta es una práctica que tiene que ver con administrar el currÃculum. Como hemos dicho en otras oportunidades, el currÃculum en sus distintas expresiones es una amplia declaración de lo que queremos que los estudiantes aprendan. Sin embargo, lo que podemos hacer en la sala de clase o lo que hacemos en realidad en la sala de clase es una proporción menor de esa declaración. Y lo que el estudiante efectivamente aprende, es una proporción menor a uno. Es decir, se produce una especie de pirámide invertida. Entonces cómo hacer que esta pirámide invertida se concentre en aquellos aprendizajes que son clave. Ahà es donde el equipo de liderazgo instruccional va a tomar decisiones de tiempo, de secuencia y de formas de medición. Definir qué significa una buena enseñanza y cuáles son los aprendizajes clave en matemática, es el contenido de las primeras conversaciones que los equipos eli, promueven con sus profesores. Ante la amplitud del currÃculum, es muy importante entonces focalizar. Vamos a tratar de definir aprendizajes claves, cómo aquellos que se requieren sean más duraderos, aquellos que son una especie de llave, que son una puerta de entrada a otras posibilidades y a otras oportunidades de conocimiento. Los aprendizajes clave en matemáticas son requisito para enseñar otros contenidos y otros logros de aprendizaje de mayor complejidad. En matemáticas se dice, la escalera secuencial y progresiva es clave. Vamos a entender entonces el aprendizaje clave, como aquellos conocimientos, aquellas habilidades y aquellas actitudes que se integran en la capacidad para resolver un determinado problema. En ese sentido, va a ser difÃcil diferenciar un conocimiento de una habilidad y de una actitud. Cuando un estudiante resuelve un problema está involucrado en forma integrada, el demuestra su capacidad de la misma forma como demuestra su desempeño en una actividad deportiva, en una actividad artÃstica, es una persona que está siendo desafiada y está demostrando su capacidad para resolver ese desafÃo en forma totalmente integrada. Por eso nos gustó partir por matemáticas, en matemáticas tenemos esta experiencia de integrar muy bien las dimensiones afectivas, cognitivas y procedimentales. Para planificar aprendizajes clave y para poder darles el tiempo, la secuencia y establecer la forma de medirlo tenemos que preguntarnos, ¿qué deberÃan ser capaces de demostrar los estudiantes que han logrado un determinado aprendizaje clave? En ese sentido tenemos que preguntarnos, ¿cómo vamos a medir y cómo vamos a observar esta capacidad demostrada del estudiante? Esto tiene que ver con una lógica de evaluación trasparente, de evaluación abierta dónde por supuesto que van a existir herramientas técnicas, pero la variable clave es el desempeño que podemos observar en un estudiante. La soltura con que un estudiante resuelve un problema. El involucramiento que un estudiante pone en un problema, van a ser indicadores relevantes en este sentido. Un ejemplo interesante, es descubrimos por ejemplo en enseñanza media, en primero medio se habla mucho de la habilidad para verificar que una fórmula opera o con un determinado protocolo, funciona frente a un problema. Pero se dice que esto es distinto a demostrar, a demostrar su generabilidad y demostrar la amplitud como esta fórmula o esta forma de resolver un problema se aplica a distintos contextos y realidades. En este sentido, la habilidad y el contenido son aparentemente la misma. Sin embargo, los niveles de desempeño que podemos observar en un estudiante son distintos. Podemos verificar y demostrar utilizando material concreto, estamos más cerca de la verificación, de la resolución del problema. Podemos probar usando definiciones conceptuales y podemos también demostrar utilizando números, álgebra generalizable. En este sentido hay un mismo aprendizaje, un mismo aprendizaje que es clave, que se puede observar en octavo, en primero, en segundo medio. Por ejemplo en el caso chileno. Pero por niveles diferenciados de complejidad, aplicados a situaciones distintas y utilizando herramientas matemáticas diferentes. En fin, para nosotros el equipo de liderazgo instruccional necesita profesores de matemáticas y necesita expertos en temas de evaluación y currÃculum. Básicamente para tomar decisiones sobre cuáles van a ser los aspectos claves del currÃculum y los aspectos que queremos promocionar de la enseñanza. Los equipos de liderazgo instruccional constituido van a apuntar al núcleo del proceso de enseñanza y aprendizaje en la organización escolar, van a poder legÃtimamente tomar decisiones sobre la selección de aprendizajes clave y van a poder planificar esfuerzos comunes que involucran tiempo, que involucran instrumentos, que involucran prioridades durante un perÃodo de tiempo. Esperamos seguir profundizando en qué significan y cómo operan los equipos de liderazgo instruccional que logran un impacto en la experiencia de los estudiantes, la experiencia de los profesores y el rendimiento de los mismos. Gracias.