Recordemos que es especialmente dañino la falta de higiene y consumo de alimentos azucarados antes de dormir, ya que la secreción salival disminuye durante el sueño. Por ello, como veremos más adelante, una buena higiene antes de dormir es absolutamente indispensable. Otras recomendaciones dietéticas de consenso internacional para reducir el riesgo de caries, son: reducir la cantidad y la frecuencia en el consumo de azúcares, antes de acostarse evitar bebidas o alimentos que contengan azúcar, los azúcares añadidos deben proporcionar, diariamente, menos del diez por ciento de la energÃa total de la dieta. En los niños pequeños, esto equivale a alrededor de 30 gramos diarios. Una cucharadita de azúcar equivale, aproximadamente, a unos cinco o seis gramos. En el caso de los adultos, ¿cuál es la cantidad indicada? De acuerdo con la OMS, para proporcionar beneficios adicionales para la salud, idealmente la cantidad deberÃa quedar por debajo del cinco por ciento del aporte calórico, aproximadamente de cinco a seis cucharadas diarias o 25 gramos. Se ha observado que la ingestión de azúcares añadidos disminuye, simultáneamente, a medida que aumenta la ingesta de fibra, por lo que una de las metas alimentarias para disminuir el avance de la caries dental, es un mayor consumo de alimentos básicos, integrales, frutas y verduras. Algunos componentes de la dieta reducen el riesgo de caries dental. La acción cariostática del queso se ha mostrado en varios estudios en seres humanos. De esta manera, varios investigadores hallaron una relación inversa entre el consumo de leche y el incremento de caries en un estudio realizado en adolescentes en Inglaterra, lo cual puede ser relacionado con que la leche de vaca contiene calcio, fósforo y caseÃna, sustancias que se cree inhiben la caries. Los alimentos a base de cereales integrales tienen propiedades protectoras, requieren más masticación, lo que estimula la secreción de saliva. Otros alimentos que actúan como buenos estimulantes gustativos o mecánicos de la secreción de saliva, son los cacahuates o manÃ, los quesos de pasta dura y la goma de mascar. Circunstancias particulares del paciente. Otro de los componentes que se debe considerar en el control de la caries dental, son las circunstancias particulares del paciente, donde se abordará la experiencia de caries y las enfermedades que presenta, cuya naturaleza o tratamiento ocasiona una falta de producción de saliva. Los consideramos porque son elementos cuyo control es prácticamente determinante en la dinámica del proceso de la enfermedad. Experiencia de caries dental. El enfoque de una intervención mÃnima implica una detección temprana y precisa de las lesiones, y un esfuerzo por remineralizar las lesiones no cavitadas, como en el caso de la caries de esmalte, con una atención para minimizar la intervención quirúrgica. Cuando la intervención quirúrgica es absolutamente necesaria, como suele ser el caso para una lesión cavitada activa, el procedimiento utilizado deberÃa ser tan mÃnimamente invasivo como sea posible. Se sugiere que, cuando el dentista esté en duda en cuanto a si una lesión no cavitada está activa o detenida, deberÃa ser calificada como inactiva y, necesariamente, instituir los tratamientos no quirúrgicos para controlar la progresión de la lesión. En caso de que el diagnóstico sea incorrecto, porque la lesión no es detenida, no se pierde nada al tener un enfoque centralizado en la educación y motivación del paciente. Por otro lado, cavidades que impiden el acceso de un cepillo para remover la biopelÃcula, deben tenerse en cuenta y restaurarlas. Las cavidades oclusales, por su naturaleza, requieren ser restauradas. Lesiones proximales cavitadas, donde el diente adyacente está en su lugar, también se oponen a la limpieza y requieren ser obturadas. Enfermedades relacionadas. Este factor gira alrededor de la influencia que tienen esas enfermedades o su tratamiento, en la disminución o falta de la producción de saliva o en sus caracterÃsticas, por lo que es totalmente necesaria una interconsulta médica para ver la posibilidad de cambio de medicamentos, mejor control de la enfermedad o para tomar una decisión respecto al uso de algún sustituto de saliva. Estilo de vida. Diversos estudios han mostrado cómo el hábito de fumar, el estrés, el alcoholismo y el consumo de refrescos en lugar de agua, entre otros, producen una marcada tendencia a desarrollar caries dental. Debido a que estos comportamientos y hábitos hacen referencia a las costumbres, a lo cotidiano y a las emociones del paciente, resulta complejo abordar el cambio radical de estilo de vida como parte del tratamiento no quirúrgico de la caries dental. Depende en un 99 por ciento de la propia persona. Si la persona está convencida de que su estilo de vida le causa daño, nuestro papel es simplemente de apoyo. La entrevista motivacional es una estrategia reconocida para conseguir cambios de comportamiento. Su espÃritu incluye trabajo en equipo, sugestión y autoeficacia, empleando técnicas y estrategias especÃficas. Es un método de comunicación dirigido a objetivos y centrado en personas, para fortalecer y conseguir una motivación por el cambio en nuestros pacientes. Ha demostrado afectar positivamente a los cambios de comportamiento en la salud. Reconoce que el paciente es el experto en su propia vida. Los cuatro principios básicos son: expresar la empatÃa, desarrollar discrepancias, superar objeciones y apoyar la autodeterminación del paciente. Los factores sociales son muy importantes en el control de la caries. Factores tales como ingreso, el estrato social, la educación, las actitudes, el conocimiento y el comportamiento. Todo impacta en el desarrollo de la caries dental y, por lo tanto, de su manejo. La aplicación de técnicas particulares para fomentar y motivar a los pacientes y a los padres de los niños pequeños para que acepten su función, es esencial en el control de la caries dental.