[MÚSICA] [MÚSICA] [MÚSICA] En este último vÃdeo referido a los restos de ajuares funerarios hallados en las distintas tumbas de época ramésida nos centraremos en destacar aquellas sepulturas que nos han legado las muestras más interesantes. Empezaremos precisamente por la tumba de Ramsés primero, la KV 16, que como sabemos es el fundador de la décimo novena dinastÃa. En esta además del famoso sarcófago de granito rojo inacabado fueron halladas algunas piezas de madera especialmente interesantes. De hecho, fueron halladas tanto un par de piezas en la cámara sepulcral de la misma de aspecto antropomorfo y de tamaño natural como un grupito de estatuas antropozoomorfas. En cuanto a las primeras que fueron en su momento definidas, especialmente la que vemos en la imagen de la derecha, por Belzoni como casi perfectas, se trata de efigies del monarca talladas en madera de sicomoro de tamaño casi natural que nos recuerdan precisamente a las más conocidas figuras de guardianes de la tumba de Tutankhamon. Por lo que parece bastante probable que cumpliese una función semejante, ¿no? En este caso además vemos cómo en uno de los dos casos aún se conserva incluso el bastón que formarÃa parte de este elemento iconográfico caracterÃstico, de estos tipos iconográficos de representar a los monarcas como altos dignatarios, además de como reyes y por tanto con esta capacidad de ordenar, de comandar, y por tanto como seres especialmente dignos junto a su vertiente cuasi divina, ¿no? Además, podemos ver también que los ojos hoy están vacÃos, pero es casi seguro que debieron estar incrustados por piedras preciosas, por elementos de gran valor que con el tiempo fueron sustraÃdos y por tanto hoy en dÃa perdidos. Por otro lado estarÃan este otro grupito de cinco estatuillas que son seres, se ha convenido en definir como seres del más allá. De hecho, el problema fundamental es que son figuras talladas en madera pero que no presentan inscripción alguna, por lo que no tenemos una gran seguridad en su identificación. De hecho, hay incluso una discrepancia en considerar si se trata de seres que proceden del imaginario autóctono egipcio o si por contra se trata de imágenes prestadas procedentes del próximo oriente. En cualquier caso, lo que se puede observar es que se trata de figuras sedentes con cuerpo humano. De ahà la denominación de antropozoomorfas puesto que su cabeza es una cabeza animal, ¿no? Puede ser, podemos ver cómo hay carnero, hipopótamo, un halcón, una especie como de ave también y una tortuga. En cualquier caso, estas figuras que, como digo, no existe un cierto consenso en considerar exactamente qué es lo que debÃan representar o a quiénes debÃan representar parece que es demasiado difÃcil pensar que se tratarÃa de figuras apotropaicas, ¿no? Con una función profiláctica, una función protectora. Entre otras cosas porque los distintos animales representados en el Panteón egipcio, tanto si se trata de seres fantásticos o de semidioses o de genios, llamémosle como queramos, como si se trata de dioses, digamos que presentan esta forma animalÃstica que aquà encontramos y que acostumbra a relacionarse con estos elementos de protección, de regeneración y por tanto elementos deseables en una tumba, ¿no? Y por tanto, en estos dos casos por ejemplo que se ven, en la forma de tortuga a mano izquierda o de carnero a la derecho, no costarÃa demasiado pensar que se trata de unas figuras que buscan una protección, una regeneración del propio monarca que serÃa al que acompañarÃan, ¿no? Vemos en la foto de arriba a la derecha una vista de esta cámara sepulcral con el sarcófago de granito inacabado y las piezas que estamos comentando se encontraron cercanas al mismo, ¿no? Por otro lado, tenemos otra de las tumbas especialmente interesantes. De hecho, you hemos hablado de ella anteriormente, que es la KV 17 o la tumba de Seti primero. Dejando a un lado la espectacularidad de las pinturas murales de la misma, que you han sido comentadas, nos ha legado esta tumba un elemento que también en su momento you mencionamos como es un maravilloso y delicadÃsimo sarcófago, probablemente uno de los más espectaculares entre los conservados de la civilización egipcia, realizado en calcita o alabastro egipcio. Tiene una forma antropomorfa y muestra un relieve muy delicado, muy bien cortado, muy fino y que además sabemos que en su momento originalmente estuvo relleno, estuvo rellenado por asà llamarlo de una suerte de pasta vidria denominada azul egipcio que probablemente le darÃa una mayor sensación expresiva, ¿no? Y por tanto, contribuirÃa a esta función mágica de estas escenas. Unas escenas por cierto que lo que muestran es distintos pasajes del Libro de las Puertas además de mostrar una preciosista efigie de la diosa Nut que estarÃa ocupando, pues, todo el fondo del sarcófago, ¿no? Entre estos distintos pasajes, pues, destacan sobremanera la escena del juicio de Osiris que corresponderÃa a la quinta hora, o la hora o perdón, o el sometimiento de Apofis que acaecerÃa durante la décima hora, o incluso la emergencia victoriosa you de la barca solar durante la última, durante la doceava hora. Además de este maravilloso sarcófago, también se encontraron distintos ejemplares de shauabtis, hoy en dÃa repartidos a lo largo de las colecciones de todo el mundo, y que si los contásemos todos conjuntamente llegarÃan prácticamente a unos 400. Por lo tanto, se trataba de un ajuar funerario más que consistente, un ajuar funerario muy completo. Por ejemplo, en el Louvre existen ejemplares de los dos tipos que you Belzoni en su diario de excavación mencionaba como caracterÃsticos de la tumba de Seti, que serÃan aquellos realizados en fayenza como el que vemos a la izquierda de las imágenes y a la derecha de las imágenes o a los ejemplares que estarÃan tallados en madera. De igual modo, tal y como puede verse en las propias imágenes, el tamaño también oscilarÃa. Y pese a que todos tienen elementos comunes como por ejemplo que se presentan inverbes, que acostumbran a llevar estos instrumentos o útiles agrÃcolas y que presentan inscripciones a lo largo de su cuerpo pertenecientes a algunos fragmentos textuales del Libro de Salida a la Luz del DÃa, si nos fijamos el tamaño varÃa. Por ejemplo, el ejemplo que vemos a la izquierda es de gran talla, es un ejemplar que mide casi 29 centÃmetros de altura, mientras que el que vemos a la derecha de las imágenes más popular, del que se han encontrado más número de ejemplares medÃa prácticamente la mitad. Y por tanto, sabemos que estarÃamos ante dos damas distintas, si queremos llamarle asÃ, del mismo ajuar. Otra de las tumbas especialmente interesantes serÃa la KV 7 o la tumba de Ramsés segundo. En este caso, esta tumba sabemos que fue de visita recurrente durante la antiguedad. Lo sabemos por los distintos grafitos que están inscritos fundamentalmente en los primeros corredores. Pensemos que se trata de Ramsés segundo. No es un monarca cualquiera, sino que de hecho es uno de los mayores constructores o que nos ha legado un mayor número de elementos encargados por él, tanto construcciones como estatuas de entre todos los faraones de la historia egipcia. Y por tanto, debemos ser especialmente precavidos con la aparente pobreza de su ajuar puesto que probablemente el hecho de que hubiese sido una tumba tan visitada desde la antiguedad debamos tenerlo en consideración a la hora de pensar en el por qué hemos encontrado tan pocos ejemplares, ¿no? Además no olvidemos tampoco que Ramsés segundo fue uno de los faraones trasladados durante la XI dinastÃa a la caseta de escondrijo de las momias reales, ¿no? Y por lo tanto, ahà podrÃa haberse perdido o sustraÃdo uno o varios o muchos elementos de su ajuar. Por otro lado, sus muros presentan varios libros inscritos como programa iconográfico como por ejemplo la LetanÃa de Ra, el Libro del Amduat, el Libro del Salir a la Luz del DÃa, el Libro de las Puertas, e incluso un fragmento bastante considerable del Libro de la Vaca Celeste. En cambio, pese a esta riqueza y además esta variedad de textos, el ajuar encontrado no era al menos hasta hace poco especialmente destacable. De hecho, En los últimos años, las excavaciones han sacado a la luz considerable contenido con estas excavaciones un poco más profundas perteneciente al ajuar funerario y, por ejemplo, se han excavado, se han extraÃdo, se han encontrado, hasta 450 fragmentos de calcita que procederÃan de un hipotético, hoy dÃa parece que bastante probable, sarcófago de calcita muy semejante probablemente al que acabamos de ver hace unos momentos de Seti I. Y por tanto, debemos pensar que la decoración que llevarÃan grabada, también por los fragmentos que hemos conservado, pertenecerÃa también a estas escenas del Libro de las Puertas. Es posible que este sarcófago acogiera el ataúd de madera en el que fue encontrado you en la cachette del escondrijo el cuerpo modificado de Ramsés II, o es posible que este otro ataúd de madera fuese en realidad un encargo posterior precisamente para contener la momia real you en su nuevo emplazamiento, ¿no? Junto a esto, junto a estos cuatro diferentes fragmentos, también se han recuperado elementos del arcón canópico, es precisamente en una zona que se llama suerte de fozo excavado para albergarlo, y entre las piezas que acompañarÃan este arcón canópico con los vasos canopes se recuperaron los delicados vasos de fayenza, hoy en dÃa conservados en el Louvre, que esas especialmente interesantes porque contenÃan restos del material utilizados en la momificación del monarca, y por tanto, estarÃamos ante unas pruebas algo extrañas en el sentido de singulares, no es muy habitual, precisamente en estos materiales utilizados para la momificación. En este caso, no obstante, cabe decir que se especula con la posibilidad altamente probable que estos vasos en realidad originalmente tuvieran otra función y hubiesen sido reaprovechados. De hecho, la decoración con la que aparecen rematados sus bajos es tan especÃfico como que de plantas de loto conjuntamente con el color que se ha buscado precisamente el material, esta apariencia, para que sea un color azul nos remite inexorablemente a relacionarlos con todas estas piezas caracterÃsticas de ajuares funerarios que se asocian con elementos regenerativos o elementos católicos, ¿no? Tanto los vasos en las que hay distintas terapias como esta especie como de figuritas como si fuesen como unas muñecas que aludirÃan a una suerte de concubinas, bueno, en este estilo, ¿no? Además, se han recuperado también fragmentos de distintos shauabtis y que son o fueron realizados en materiales tan dispares como la madera o la caliza más habituales, o el bronce como este fragmento y además aplanado y pobre de shauabti que se conserva actualmente en BerlÃn, ¿no? Hay que decir que es probable que este traslado del que comentábamos producido durante esta época tardÃa probablemente provocó el desmantelamiento, la pérdida, o incluso un poco como es que se repartiesen y se desubicasen varios de los elementos que a veces explicarÃan como un cofre en el que se hubiesen guardado estos shauabtis, y por tanto, cuesta un poco hacerse la idea de por qué motivo estarÃan realizados de distintos materiales. Incluso existe un caso especialmente curioso como es el de esta pieza conservada en el British que en la vigesimoprimera o vigesimosegunda dinastÃa fue transformada, es decir, originalmente era un shauabti de madera de Ramsés II pero durante esta época fue transformada en efigie que de Osiris, efigie de culto, se le cortó la parte inferior, se le anexionó esta especie como de base, de podio, y se ennegreció para que fuese una figura de un Osiris, ¿no? Por lo tanto, realmente estamos ante un poco una disyuntiva en cuanto a qué debió pasar exactamente con el ajuar de Ramsés II. No obstante, es bastante probable que se tratase de un ajuar espectacular. Finalmente, cabrÃa hablar de la KV 6, la tumba de Ramsés IX, que también estuvo abierta desde la antigüedad a las visitas constantes, de hecho, en este caso, se han constatado hasta 46 grafitos distintos. Están documentados en varias partes de la tumba en los muros interiores y que aluden a las distintas visitas que ha ido recibiendo esta tumba, ¿no? Por suerte, todos estos visitantes aparente anónimos pasaron por alto varios objetos de ajuar que fueron hallados you en la primera excavación comandada por Henry Salt y que posteriormente llegaron, gracias a este cónsul británico, al museo británico. Los donó y entre los cuales se conectaban sobretodo, aquà vemos una proyección en la tumba, se juntaban sobretodo varios ejemplares de shauabtis, ¿no? El shauabti que en este caso podemos ver que nuevamente está tintado con una especie de bitumen y que es probable que aludiese a algún tipo de acto cultural parecido al que acabamos de comentar que se llevó a cabo con el de Ramsés II, ¿no? De igual modo, también se encontró estatuillas de tamaño natural también parecida a la que hemos visto al principio de este vÃdeo y que se ha convenido siempre que serÃa una suerte de estatua para el Ka, más que nada por el tamaño natural de la misma. Y se encontraron también varios ejemplares de ostraka distintos, e incluso, una singular estatuilla algo extraña incluso hoy en dÃa que pareciera representar un genio del ma´s allá, ¿no? Si nos fijamos, es un ser con un aspecto un tanto besÃstico, se parece en cierto modo al dios Bes, no del todo, es curioso, y parece que esté sujetándose la máscara cuando en realidad es la propia barba, una barba larga, una barba funeraria que pareciera sujetar con las dos manos, ¿no? Lo interesante de esta pieza, además de su extraña forma, que esta iconografÃa que algunos autores también han querido vincular al próximo ente, es que contaba con un compartimiento secreto en su espalda, en su parte de acero que permitÃa guardar un papiro que desgraciadamente no se conservó, ¿no? Y por tanto, nos habrÃa podido ayudar tal vez a dilucidar la función mágica que habrÃa tenido esta pieza en su momento y en el entierro original. [SILENCIO]